Ahora mismo siento los golpes, me duele todo, pero sobre todo tengo mucho miedo. Siento en mi cuerpo la violencia vivida por Yoani y los bloguers que junto a ella sufrieron un secuestro estilo camorra, cuando pretendían asistir a un performance contra la violencia.
Lo que más me impresiona es que (y cito): …"los curiosos se agolpaban alrededor y yo gritaba “Auxilio, estos hombres nos quieren secuestrar”, pero ellos pararon a los que querían intervenir con un grito que revelaba todo el trasfondo ideológico de la operación: “No se metan, estos son unos contrarrevolucionarios”.
Y yo me pregunto ¿es que acaso al ser "contrarrevolucionario", se pierde el derecho a la libre asociación, a la libertad de expresión y de movimiento? ¿Acaso porque no nos sintamos identificados con un proceso llamado revolucionario, alguien tiene el derecho de secuestrarnos o golpearnos sin la menor piedad?
¿Qué clase de democracia es la que tantos en Cuba proclaman, cuando cada segundo se violan los mas elementales derechos humanos? ¿Quién en este mundo tiene el derecho de disponer donde voy o con quien me relaciono? ¿Por qué no se puede ser contrarrevolucionario y libre a la vez? ¿Por qué tantas exclusiones?
Creo que en Cuba hace falta gente como estos jóvenes, que salen a la calle y demuestran lo que sienten. Creo como Yoani, que éstos que hoy se proclaman revolucionarios y su revolución tienen los dias contados; pero también se que hace falta mucho valor, mucha fuerza. Tengo miedo por Yoani y sus compañeros porque me parece que se están exponiendo demaciado y su labor como bloguers es muy importante para todos.
Yo solo espero que esos cambios que esperamos lleguen pronto con la ayuda de todos.
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